Rincones de cuento de hadas: Alsacia, Selva Negra y el Rin ¡vuelos incluidos!

¡Recuerda! Si bien no es lo habitual, puede suceder que el itinerario empiece a la inversa. Te ponemos un ejemplo: El inicio del viaje está contemplado para empezar descubriendo la ruta de los vinos de Alsacia, y finalizar en la Selva Negra, no obstante, es posible que empieces en la Selva Negra y finalices haciendo la ruta de los vinos de Alsacia. Te confirmaremos el inicio del itinerario en la documentación final.

Ha llegado el día, ¡hoy empieza nuestro viaje volando a Basilea! A la hora indicada, nos encontraremos en el aeropuerto de la ciudad de origen. Una vez hechos los trámites de facturación, embarcaremos en el vuelo con destino a Basilea, nuestro primer destino.

Empezaremos el día desayunando en el hotel y, después, saldremos para realizar la célebre ruta de los vinos alsacianos. Pasearemos por las calles de una de las ciudades más hermosas de la región, Colmar, con sus casas de colores y sus rincones medievales llenos de encanto. Durante la ruta, visitaremos Riquewihr, una encantadora población amurallada, donde se elaboran los famosos vinos blancos: Riesling, Sylvaner, Tokay y Gewurztraminer, a los pies de los Vosgos. Descubriremos también, Ribeauville, en esta bella ciudad alsaciana abundan las casas tradicionales repletas de flores.

Tras realizar esta ruta, almorzaremos. Durante la tarde, nos trasladaremos hacia Estrasburgo, la capital de Alsacia.

Finalizaremos este bonito día con nuestra llegada al hotel en Estrasburgo, donde cenaremos y podremos coger fuerzas para el día siguiente.

Hoy nos despertamos en Estrasburgo. Para empezar el día con energía, desayunaremos y, posteriormente, realizaremos una completa visita guiada y dedicaremos la mañana a conocer una de las ciudades más dinámicas y cosmopolitas de Francia. Estrasbugo se encuentra cerca cerca de la frontera con Alemania y el centro histórico de esta ciudad es considerado Patrimonio de la Humanidad desde 1988. De ella destaca su rica historia, su arquitectura impresionante y su importancia como centro político y cultural de Europa, pues es la sede del Parlamento Europeo, el Consejo de Europa y el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.

Tras almorzar, disfrutaremos de la tarde libre para descubrir los secretos de esta ciudad a nuestro ritmo.

Puedes aprovechar la tarde para visitar algunos de los sitios más emblemáticos de la ciudad. Entre ellos destacan: la Catedral de Notre-Dame de Estrasburgo, una majestuosa catedral gótica famosa por su torre y reloj; el encantador barrio de La Petite France, en el que podrás ver sus coloridas casas de madera rodeadas por canales o el Palais Rohan, un palacio de estilo barroco en el que encontrarás el museo Arqueológico, el museo de Artes Decorativas y el museo de Bellas Artes. Estos son solo algunos de los puntos turísticos más visitados de la ciudad, ¡la ciudad tiene muchísimos rincones que ofrecerte!

Finalmente acabaremos el día regresando al hotel para poder descansar.

Hoy nos espera un largo día por delante, pero... primero de todo, toca coger fuerzas desayunando. Después saldremos hacia Coblenza, donde realizaremos una breve parada para conocer la ciudad. Es conocida por ser la puerta de entrada al Valle del Rin y dispone de un pequeño centro histórico donde destaca la Catedral de San Castor.

Continuaremos nuestra ruta hacia Bopard, donde embarcaremos para realizar un bonito crucero por el Rin, más precisamente, navegaremos por el tramo más espectacular, ya que, podremos apreciar el valle romántico con sus castillos, fortalezas y viñedos en las orillas de hermosas ciudades.

Disfrutaremos de nuestro almuerzo a bordo del crucero y pasaremos por St. Goar para seguir con nuestra ruta con destino Frankfurt. Durante el trayecto haremos una parada en el coqueto pueblo medieval de Bacharach, considerado uno de los más bonitos del Rin con sus casas de entramados de madera, torreones góticos, ruinas de capillas medievales, etc.

Terminaremos el día con nuestra llegada a Frankfurt donde nos alojaremos en nuestro hotel y descansaremos.

Continuamos con nuestro itinerario despertándonos en Frankfurt y, tras desayunar, realizaremos un recorrido panorámico de la ciudad con sus célebres rascacielos rodeados de antiguos rincones medievales.

Tras la visita, salidremos hacia una de las ciudades más hermosas de Alemania: Heidelberg, se encuentra a orillas del río Neckar y está dominada por su imponente castillo. Realizaremos una visita guiada por su casco histórico, que alberga la Universidad más antigua del país, con sus callejuelas y hermosos rincones barrocos.

Una vez realizda la visita, almorzaremos y tendremos la tarde libre para visitar todos los rincones de la ciudad a nuestro ritmo.

Finalizaremos este día cenando, para después, tener tiempo para descansar.

Desayunaremos en el hotel y salidremos hacia Friburgo, la alegre ciudad universitaria del sur, en la que realizaremos un interesante paseo por el barrio de la Catedral, la casa Wenzinger, la casa de la Ballena, el Ayuntamiento y la antigua Universidad. Continuaremos nuestro viaje para realizar nuestra excursión hacia el Lago Titisee, en el corazón de la alta Selva Negra, lago de origen glaciar en un frondoso paisaje rodeado de abetos.

Llegados a este punto, almorzaremos y continuaremos nuestro itinerario por una de las carreteras más bonitas de la Selva Negra, que nos dirigirá a Triberg, donde podremos admirar sus célebres cascadas (si la climatología lo permite).

Esta noche la pasaremos alojados en nuestro hotel en la Selva Negra.

Como cada mañana, desayunaremos en el hotel para después dirigirnos hacia Basilea. Las torres de su esbelta Catedral y el pintoresco edificio del Ayuntamiento son las joyas arquitectónicas que guarda una de las ciudades más importantes de Suiza. Basilea es conocida por su amplísima oferta cultural, sus exquisitos museos, su afamado carnaval y la concentración de edificios de autores de la talla de Frank Gehry o Zaha Hadid.

Hoy disfrutaremos de la tarde libre para poder visitar la ciudad a nuestro ritmo. La ciudad de Basilea tiene muchos rincones por descubrir. De la ciudad destaca la Catedral de Basilea, una impresionante catedral gótica que ofrece a sus visitantes vistas panorámicas de la ciudad; el Ayuntamiento de Basilea, es un edificio de estilo renacentista que se caracteriza por su torre y fachada roja; también puedes descubrir más sobre la cultura y economía de la ciudad visitando su Marktplatz (plaza del mercado) allí podrás ver todos los productos locales de la ciudad.

Finalmente, acabaremos el día regresando al hotel para poder descansar.

Tras el desayuno, todo lo bueno acaba y, a la hora indicada, nos trasladaremos al aeropuerto para coger el vuelo de regreso a casa. Aquí termina nuestro viaje, seguro que nos habrá creado recuerdos inolvidables. ¿Sabes ya, cuál será el próximo destino?